El tiempo ha llegado para unos pocos y para otros, es sólo una fracción de los meses que quedan. Ese momento, por supuesto, es la temporada de caza en Nuevo México. Con el clima que continúa enfriándose, sabemos que el otoño va por buen camino.
Para algunos, es la emoción del comienzo de caza de palomas a partir del 1 de septiembre. Para otros, es la emoción de la caza mayor y la oportunidad de llenar un congelador con increíble carne salvaje y orgánica. Otros esperan ansiosos las horas de la madrugada brutalmente frías mientras rompen una capa de hielo sobra el agua, con la esperanza de atraer bandadas de patos a una configuración de señuelos. También están los que sueñan con una gran bandada de codornices justo debajo de sus pies.
No importa qué se emocione y cómo llene su congelador, hay algunas cosas importantes para recordar antes de salir al campo.
En primer lugar, si aún no lo ha hecho, busque algunas ubicaciones para saber a dónde se dirige. Si ya lo hizo y sabe a donde va, entonces está en muy buena forma. Si no es así, salga al campo, o al menos consulte un programa en línea que pueda ayudarlo a comprender el terreno.
Hablando de forma, si aún no ha comenzado, asegúrese de hacer algunos ejercicios cardiovasculares y aumentar ese ritmo cardíaco antes del gran día. Nunca es divertido llevar todo su equipo y luchar mientras sube por la ladera de una montaña.
Entonces, con suerte, sabe dónde cazará, pero ¿también verificó el estado de la tierra y sus reglas particulares sobre dónde puede y dónde no puede ir? ¿Hay cierres? ¿Sabe qué tan pronto antes de la caza puede explorar el área? ¿Revisó las reglas del lugar donde quiere acampar? ¿Puede hacer fuego en su campamento? No espere hasta que esté en su área de caza o lugar de campamento para descubrir que no hay acceso o que no puede acampar; llame a la agencia de administración de tierras que posee la propiedad.
¿Tiene la suerte de cazar en terrenos privados? Bueno, no olvide de llevar el consigo de permiso escrito. Si necesita un formulario fácil de usar, haz clic en este enlace.
¿Cómo está su puntería? ¿Ya salió a practicar? Sea que esté disparando un rifle, un arma de avancarga, una escopeta o un arco, consiga las mejores probabilidades de llevarse un animal a casa, además de limitar las posibilidades de herir a uno. Es su obligación como cazador ético hacer un tiro limpio al animal.
¿Ha revisado su equipo que está enterrado en la parte trasera de su armario? No olvide de checar antes del gran día para asegurarse de que esté listo. No hay nada como olvidar arreglar el abrigo que se enganchó en un árbol, o la hebilla rota de una mochila o el cordón roto de la bota la noche antes de una cacería.
Si usted es una de las personas a cual le gusta la oportunidad de llevar a su mejor amigo de cuatro patas en busca de codornices u otra caza, ¿está preparado su perro? ¿Su perro está preparado para la tarea de largas caminatas en el calor? En algunas partes de Nuevo México, hay muchas espinas y mezquite, por lo que unas botas de calidad para su perro serían una buena inversión para su compañero de caza que hace todo el trabajo de encontrar y recuperar a sus aves. Además, cuando esté allí, asegúrese de haber traído suficiente agua para los dos. No es el momento de quedarse sin agua. Si usted es del tipo que saca a su perro en las mañanas frías, sonando una llamada de pato al cielo, ¿le hace falta un chaleco calentito a su perro? ¿Es su perro en buena forma para nadar en agua fría? Estos son algunos pensamientos que debe considerar antes de partir.
Además, no olvide las golosinas por todo el trabajo duro.
Si está cazando una especie de caza mayor, no olvide su etiqueta. No hay nada peor que llegar hasta su lugar de caza y darse cuenta de que olvidó su etiqueta en la encimera de la cocina. No querrá conducir horas de regreso a casa mientras sus compañeros de caza están disfrutando a la cacería. Si está etiquetando electrónicamente a su animal, no olvide su smartphone ni algo en lo que pueda escribir y adjuntar a su animal.
Por último, no importa la caza en la que se encuentre, asegúrese de planificar con anticipación las emergencias. Dígale a alguien a dónde va, traiga muchas capas de ropa, traiga agua y planifique cualquier escenario que pueda surgir. Un poco de preparación y planificación pueden significar la diferencia entre sobrevivir una mala situación en el desierto si se pierde, se atasca o se lesiona.
Y, como siempre, diviértase y disfrute de todo lo que Nuevo México tiene para ofrecer.